Todo el mundo tiene una lista de deseos, cosas que cree que mejorará la vida. ¿Qué hay en la lista suya? ¿Sus deseos están en acuerdo con los deseos de Dios para su vida?
Mientras escribo esto, el mundo se tambalea por el COVID-19, también conocido como coronavirus. Mi esposa y yo nos encontrábamos a 4.000 kilómetros de casa cuando golpeó la crisis. En un mes, ya no era el problema de un país, sino que se había convertido en una amenaza mundial.
Los días en que vivimos son malos y es urgente que se advierta a la sociedad del juicio venidero. ¿Habrá hijos de Noé dispuestos a predicar la justicia con valentía? Que no nos encontramos con sangre en nuestras manos por no haber advertido del juicio que se acerca.